Hablamos con Laura Benítez, creadora del movimiento @Wikigrillas_ y una de las editoras del libro “Crónicas grillísticas”, un compendio de historias reales femeninas poderosas que vale la pena leer.
Soy testigo del esfuerzo que hizo el equipo de Wikigrillas (Grupo privado en Facebook que reúne más de cinco mil mujeres y personas identificadas con la comunidad LGTBI+), para sacar adelante la idea de un libro que reuniera las historias femeninas cotidianas más interesantes de las mujeres que interactúan en esa comunidad.
La idea del libro no nació de la nada, sino de historias anónimas que se fueron haciendo famosas en este grupo, con base en la ciudad de Medellín, en las que sus protagonistas contaban sus aventuras, anécdotas más significativas, momentos difíciles y dudas femeninas, que en muchas lugares siguen siendo temas tabú.
Vale acotar que este es un esfuerzo de varias mujeres maravillosas que se unieron para sacar adelante este proyecto: las editoras Juliana Paniagua Rodríguez y Alejandra Ospina Vélez; la correctora Ana Margarita López-Ospina y la fabulosa ilustradora, Daniela Sanín.
Con el libro en mano, decidí entrevistar a la líder de este grupo maravilloso y una de las editoras de esta obra, hecha con mucho amor y ganas: Laura María Benítez.
¡Disfruten y compren este libro!
Hablemos un poquito de Wikigrillas y Laura Benítez
Laura, ¿A qué te dedicabas antes de crear WikiGrillas?
Yo trabajaba como Planner Digital y Community Manager para agencias todo lo relacionado con redes sociales, fui Social Media Manager, analista de datos de muchísimas cuentas muy serias, grandes, acartonadas y sin personalidad; pero esa parte corporativa me ayudó muchísimo a tener cierta diplomacia y a mediar conversaciones.
Un día estaba con unas amigas del trabajo, y dije que iba a crear un grupo que se llamara Wikigrillas, todas se rieron, por lo charro (gracioso) que era.
Cuando lo publiqué en Facebook, me respondieron un montón de personas diciendo que querían participar. Después de eso, fui saltando de trabajo en trabajo porque no me sentía a gusto en ninguno, me equivocaba demasiado y estaba frustrada porque no me fluía seguir en eso.
Yo a Wikigrillas lo veía como un chiste, no lo veía más allá de eso, pero mi marido fue el que le vio potencial y me incentivó a moverme con todo. La verdad, eso fue una revelación de la vida, todo se fue dando y en estos momentos soy Community Manager Freelance de varias marcas y, al mismo tiempo, está este proyecto que cada vez es más grande.
Lo bonito de Wikigrillas es que mientras las personas se iban enamorando de él yo también iba sanando y cambiando un montón de cosas mías, entonces ha sido una construcción súper bonita y solidaria.
Hace tiempo contaste una historia de violencia que tuviste antes de tu actual esposo, que yo creo que tiene que ver mucho con la construcción de esta comunidad y esas historias que se comparten allí, ¿Puedes contarme qué te pasó y qué aprendiste de eso?
La verdad, ese fue un proceso muy difícil para mí y fue como un conjunto de malas decisiones tomadas, no solo con esa persona, sino con todas las relaciones de parejas y amistades que había tenido antes; eran relaciones muy dañinas, violentas y abusivas para mí.
En mi primer matrimonio, las cosas se salieron de control, hasta llegar al punto donde mi vida corría peligro. Adicionalmente me empecé a enfermar, me desmayaba, no me podía levantar de la cama, me echaron del trabajo porque no era capaz de estar bien; fui al medico y mis valores estaban estables, fui a un psiquiatra y me recetó un tratamiento con pastillas que no me funcionaron porque con todo eso, me seguía sintiendo mal.
Al final empecé a hacer yoga y a meterme mucho en el cuento de las terapias alternativas, y al iniciar ese proceso, me di cuenta de que las respuestas estaban dentro de mí y eso fue lo que me permitió salir de ahí.
Me di cuenta del montón de cosas que había permitido, que yo no era culpable de que las relaciones pasadas hubieran terminaron mal -yo me sentía súper culpable por eso-, y para mí lo más difícil de tomar la decisión de terminar con mi matrimonio era esa sensación de culpa que me invadía.
Con el tiempo mandé a la mierda todo eso y mi vida empezó a cambiar.
Ese cambio me lo dediqué a mí, a la soltería y a pasarla bien; yo digo que esas fueron como unas vacaciones de la vida. Hay una persona que admiro mucho, Coral Herrera, una bloguera fantástica, que dice que uno a veces tiene que tomar unas vacaciones emocionales y yo creo que eso fue lo que me pasó en ese momento.
Después de un tiempo conocí a Felipe, mi pareja y todo se fue dando. Gracias a esa relación sana que construí con él, tuve más confianza conmigo misma y fue lo que me impulsó a explotar Wikigrillas, porque eso fue algo que me cayó como una granada.
El público de Asuntos de Mujeres está formado, en su mayoría, por mujeres venezolanas, colombianas y españolas, y muchas no entienden el término “grilla”
¿Qué es una “grilla” y por qué decidiste usar ese nombre?
Bueno, todavía mucha gente lo ve como un término para categorizar a las mujeres atrevidas, que se visten de una manera llamativa, que hablan abiertamente del sexo y lo buscan. Anteriormente era un término para decir que esa mujer no iba a llegar a nada serio, que esa no va a ser la novia, la esposa; que es más una amiguita de un rato, la fácil y ya.
A mí me llamaba mucho la atención esa palabra, sobre todo, porque en el pasado así se referían a mí.
Yo era mucho de querer hacer las cosas o vestirme como yo quisiera sin dar explicaciones, o sea, ¿Por qué yo voy a dejar de hacer algo si no le estoy haciendo mal a nadie?
Entonces cuando creé Wikigrillas, eso venía mucho de mí, de mis búsquedas, de lo que yo era en ese momento; y haciendo la página, me di cuenta de que muchas mujeres necesitaban ese espacio de respiro, donde se sintieran libres de ser quienes son, sin acartonarse en la mujer perfecta.
Así, poco a poco, las mujeres empezaron a decir: ¡Yo también soy una grilla! y creció la página, muchos lo ven como un grito de liberación, de respiro, de ponerse la etiqueta de: Soy lo que soy y eso es lo que importa.
Hablemos del libro “Crónicas grillísiticas”
Yo veo en este libro, algo que el movimiento chileno “La rebelión del cuerpo” llama la “Democratización del dolor”. Esto consiste en que cuando una mujer cuenta su historia, la otra se identifica y nos damos cuenta de que, eso que tanto callamos, nos pasa a muchas y es muy común en varias de nosotras al mismo tiempo. ¡Eso se refleja en el libro que ustedes acaban de publicar!
¿Cómo empezó esto de publicar estas crónicas?
Al principio, las personas la publicaban con sus caras.
En la primera crónica yo estaba en un cabaña sin señal, en ese tiempo yo no filtraba las publicaciones, ni tenía un comité de administradoras; era básicamente yo sola.
Vi una publicación de una chica que preguntaba por lo más extraño que nos había dicho un hombre después de tener relaciones, y las demás empezaron a echarse cuentos súper cómicos y abiertos sobre el tema.
Así creció la curiosidad de las personas por estar y participar en la página. Lo malo es que como era abierto, o sea, salía el nombre y apellido en los comentarios, cualquier persona se metía, los veía, le tomaba un capture y lo compartía.
Entonces, a mí me llagaron chicas diciendo que alguien había visto su comentario por el grupo y se lo había mostrado a su ex; entonces las personas dejaron de escribir y compartir sus experiencias.
Un día, una amiga me llamó y me dijo que quería contar su historia, que había abortado y que lo quería publicar anónimamente.
En ese momento, no habíamos tocado el tema del aborto y tuvimos que advertir lo que íbamos a publicar. Cuando salió, hubo un montón de chicas que se animaron a publicar anónimamente.
Por eso se me ocurrió la idea de abrir un correo al que llegaran todas estas historias y se publicaran los miércoles.
Bueno, las personas se emocionaban por esos miércoles de crónicas. Incluso hubo un momento donde llegaban tantas, que decidimos publicarlas todos los días y mientras nos iban llegando, las íbamos publicando y así fue como nacieron las crónicas grillísticas.
¿Cómo escogieron la crónicas del libro?
La idea del libro salió en octubre de 2019, y en noviembre mi marido me volvió a dar el empujoncito para concretar el proyecto. En diciembre empezamos a revisar todas las historias.
Revisé cada una de las historias que teníamos en el correo, seleccioné las que me parecían mejores, contactamos a la persona explicándole que queríamos hacer un libro y que la íbamos a publicar en anonimato.
Había muchísimas historias, pero lo que buscábamos era variedad; también, había muchas que estaban mal redactadas, que no se entendían muy bien y por eso, decidimos realizar otro filtro.
El criterio era escoger las que representaran la bomba de lo que nadie habla, e irnos con todo.
Yo no quiero hacer spoiler, porque quiero que lean las historias y se sientan reflejadas en ellas. Pero dime tú misma, ¿Por qué tenemos que comprar este libro? ¿De qué nos tenemos que dar cuenta con él?
Primero, por lo que tu decías de la democratización del dolor. Hoy en día, hay muchas mujeres que se sienten solas, no tienen un espacio para expresarse, sus amigas no las entienden, no se sienten en confianza, etc., entonces, este es un libro que te acompaña, con el que te vas a sentir identificada y vas a confirmar que vas a estar bien a pesar de la circunstancia por la que estés pasando, por eso me parece importante tenerlo.
En segundo lugar, porque hicimos una narración de mujeres reales, dejamos atrás todas esas ideas preconcebidas de cómo tiene que ser una mujer y plasmamos las realidades de la mujer actual.
Por eso, los hombres también deberían leerlo y permitirse ese espacio de reflexión de todo lo que les pasa a las mujeres, contado con claridad y sin bobadas.
¡Eso es lo que más me gusta, que está contado sin pelos en la lengua! ¿Qué dijeron las autoras y qué ha dicho la gente que lo tiene en sus manos?
Todas las autoras de las historias han comprado el libro y se emocionan por tener plasmado su relato, incluso hay una historia de un trío, donde la autora me escribe y me dice que cada una de las que hizo el trío compró un ejemplar para tenerlo guardado.
Otra, que le compró un ejemplar a cada miembro de su familia para que lo leyeran y compartieran; en fin, ha habido muchísimo feedback positivo, porque es tan real que se lee en una sentada.
Otras me han dicho que me van a enviar las próximas crónicas para la segunda edición, y seguro va a haber otra. Mi mamá que es súper conservadora, me dijo que lo ha disfrutado mucho, y lo más chévere es que se genera este sentido de complicidad e identificación con las historias.
¿Has recibido críticas, alguien que te diga que te volviste loca publicando esas historias?
Ahora no me ha pasado, pero Wikigrillas en general, ha tenido sus haters y detractores. Una vez un periodista publicó un post diciendo que no podía creer que existiera un grupo que se llamara Wikigrillas, que él jamás le llamaría así a su esposa o a sus hijos y un montón de cosas más…
Yo lo que digo es, que si estuvieras en Wikigrillas, sabrías de qué se trata, qué es lo que pasa ahí adentro y no tendrías esos conceptos.
Yo creo que el libro genera tantas cosas y está contado de una manera tan casual, que las personas no tienen nada que decir sobre eso, porque es una verdad y una realidad que nos pasa a muchas mujeres.
La verdad y la realidad… Tanto así que Nacho Vidal las mencionó. ¿Eso cómo fue?
Hay una historia de Nacho Vidal, que no vamos a contar para que se la lean (jajajaja), pero un día yo estaba en mi computadora y veo que un Nacho Vidal nos escribe -pensando que era cualquier perfil falso- cuando me meto y veo que nos ha comentado: “Gracias por la historia”. Yo quedé atónita y todas empezamos a gritar de emoción.
Después nos enteramos que una compradora del libro es amiga de él, le contó todo sobre el libro y él le pidió que le pasara las fotos para publicarlas en sus redes; cuando vimos eso, ¡Nos sentimos ¡famosisímas! sobre todo porque el libro lo creamos todas, desde la producción, la edición hasta las ilustraciones; todo fue creado por el grupo de Wikigrillas.
Entonces eso para nosotras significó y nos ayudó muchísimo.
Me gusta de ustedes que se atrevieron y lo hicieron… ¿Qué consejos le das tú a todo ese grupo de mujeres que están queriendo hacer algo, pero no se han atrevido?
¡Lo más importante es creer! creer que puede pasar y que lo puedes hacer.
Las mujeres hemos pasado por tanto y seguimos teniendo una fuerza gigante, trabajamos, cuidamos hijos, nos ocupamos del hogar… Somos súper capaces de hacer muchas cosas y las hacemos con esa determinación y fuerza que nos caracteriza.
Entonces el consejo es ese, que aproveche esa fuerza y lo haga, que se atreva, que lo peor que puede pasar es que no salga; y si no funcionó, no funcionó; pero te quedas con la tranquilidad de que se intentó absolutamente todo.
La fuerza está ahí – así suene súper Star Wars-, confía en que puedes hacerlo y ¡Para adelante! También aprovecha de unirte y apoyar a otras mujeres, en la unión y en la solidaridad, está la clave.
¿Qué hace Wikigrillas para promover la sororidad?
No sé si tu te viste “Sex Education” pero hay una escena que me encanta en la segunda temporada, en la que encierran a todas la niñas y les ponen un ejercicio sobre las mujeres, y por sus diferencias empiezan a pelear. En eso viene una chica, se para y cuenta que la abusaron en un bus y expresa lo que siente.
La respuesta inmediata fue que todas fueron a apoyarla y a compartir sus experiencias de abuso.
Lo importante es que ellas ahí se dan cuenta de que los que las une como mujeres, no es que tengan que ser iguales y les tenga que pasar las mismas cosas, sino que cada una, en sus vivencias y en lo que significa ser mujer en esta sociedad, entiende lo que le pasa a la otra y la ayuda; al final eso es lo que nos une.
Muchas veces hay encontrones, desacuerdos, etc., pero te aseguro que cuando una mujer necesite una ayuda, todas estaremos ahí para ella.
Para mí esa es la sororidad, entender que aunque no seamos amigas, ni nos parezcamos, estamos en una sociedad que nos ha hundido y silenciado por muchísimo tiempo, y al final, todas nos podemos identificar con eso. Entonces, va más allá de cualquier cosa y quedó demostrado en la serie, en Wikigrillas y en Asuntos de Mujeres.
¿Dónde y cómo podemos comprar el libro?
Para comprarlo en Colombia, pueden entrar a www.wikigrillas.com/shop y adquirirlo en físico por 36.800 pesos colombianos, y próximamente lanzaremos el ebook para todas las que viven en otras partes del mundo.
Sigue a Wikigrillas en su cuenta de Instagram: @wikigrillas_
Fotos: Cortesía de Laura Benítez.
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